Trucos para mejorar tus fotografías

El mejor truco para mejorar tus fotografías es hacer fotografías. La práctica nos permitirá saber identificar las situaciones y cómo retratarlas. Además, si aprendemos a controlar la cámara podremos sacar el mayor provecho de ellas. A continuación te detallo algunos trucos o reglas que es interesante conocer. No hay que seguir siempre las reglas pero para romperlas hay que conocerlas.

 

Llena el encuadre

Existen muchas maneras de mejorar las fotos: una de las más eficaces consiste en llenar el encuadre con el sujeto. Convierte el sujeto principal en el único que figure en el encuadre y la fotografía tendrá más impacto. La razón es sencilla. Si el sujeto llena el encuadre, no hay distracciones. El ojo se dirige al sujeto y se queda alli.

Hay dos maneras de rellenar el encuadre. Primero, aproxímate con la cámara. Para saber hasta que proximidad puede llegar a enfocar el objetivo, pase éste a enfoque manual y gira el anillo de enfoque para fijar la distancia mínima de enfoque. Mira entonces por el visor y avance o retroceda hasta que el sujeto quede enfocado. Esa será la distancia de enfoque más corta de ese objetivo. Lo más probable es que sea mucho menor que la distancia a la que disparas normalmente.

La distancia mínima de enfoque resulta demasiado corta en muchas fotos, pero sólo con aproximarse un poco al sujeto los resultados serán muy distintos. La otra manera de rellenar el encuadre es usar un objetivo con una longitud focal mayor. Un objetivo zoom permite emplear distintas longitudes focales sin cambiar de objetivo. Cuando pases el objetivo a valores propios de teleobjetivo, el sujeto aumenta de tamaño en el visor. No obstante, intenta no recurrir a un objetivo zoom para llenar el encuadre. Una mayor longitud focal aumenta el riesgo de que la imagen resulte borrosa a consecuencia del movimiento de la cámara. Lo ideal es aproximarse primero al sujeto y luego usar la función zoom para encuadrar con precisión.

 

Punto de vista

El lugar desde donde se hace la foto es muy importante. Es habitual ver un sujeto interesante, llevarse la cámara a los ojos y ajustar el zoom del objetivo para llenar el encuadre. Pero esto no siempre da las mejores fotos. Antes de oprimir el disparador, dedica un instante a pensar en la foto. ¿Saldría mejor si se moviera un poco hacia la derecha o hacia la izquierda? ¿Puede avanzar o retroceder? ¿Más alto o más bajo? Si es posible, desplázate alrededor del sujeto para verlo desde varios lados y con distintos ángulos. Algunos fotógrafos opinan que tener la cámara en un trípode supone una ayuda. El proceso se ralentiza, dándole tiempo para echarte hacia atrás y mirar realmente a todos los elementos que contiene la escena situada delante de la cámara.

Composición

La posición del sujeto en el encuadre, y su tamaño, influyen considerablemente en la foto. Disparar con la parte más importante de la escena en el centro del visor a menudo da buen resultado, pero puede llegar a ser repetitivo. Para dar más riqueza, intenta colocar el sujeto en otras partes del encuadre. Una técnica de composición muy útil es la «regla de los tercios». Imagina que en la pantalla de enfoque de la cámara hay líneas que la dividen en tercios, tanto horizontal como verticalmente, algo parecido a la retícula del juego de cruz y raya. Coloca el sujeto en cualquier intersección de las líneas, a fin de transmitir una sensación de equilibrio y armonía. Otra técnica consiste en emplear un sujeto del fondo para dirigir la vista hacia el sujeto principal. Pero las reglas están hechas para romperse y las grandes fotos no siempre se ajustan a las reglas de la composición.

Fotografía encuadrada siguiendo la regla de los tercios y con protagonismo del color | Daniel Nuevo 2015

Uso del color

El color afecta a cómo vemos la imagen. Algunos colores parecen cálidos y acogedores; otros resultan fríos y distantes. Los colores del sujeto no pueden cambiarse, pero sí se puede estar alerta ante la posibilidad de encontrar eficaces combinaciones de colores.

  • El rojo es un color dominante: en una foto, hasta una pequeña salpicadura llama la atención.
  • El azul es frío y a menudo parece difuminarse en la foto. Puede resultar muy sedante.
  • El verde es el color de la naturaleza. Es fresco, pero relajante
  • El amarillo es brillante y destaca. El amarillo puro no se ve con frecuencia en la naturaleza; a menudo contiene los colores anaranjado o verde.
  • El anaranjado es un color cálido que evoca el otoño. Combina bien con la mayoría de los colores.
  • Marrón es el color de la tierra. Es un lienzo muy bueno para otros colores, pero raramente produce una imagen atrayente cuando se emplea como tonalidad principal.

 

Un truco para combinar bien los colores es escoger los que se oponen en el circulo cromático